Implementación Ley Karin: ¿Cuáles son los 3 problemas más comunes que presentan las empresas?

  • Enviado por: Cristina Soto

Con la entrada en vigencia de la Ley Karin, muchas organizaciones enfrentan desafíos que pueden poner en riesgo el cumplimiento de la norma y la creación de ambientes laborales seguros. Conoce cuáles son los tres problemas más comunes y cómo superarlos.

1. Falta de claridad en la elaboración y comunicación de los protocolos

La Ley Karin exige la creación de protocolos de prevención adaptados a la realidad de cada organización, los que deben incluir la identificación de riesgos psicosociales y medidas claras de acción. Por eso, contar con protocolos genéricos suele dificultar su aplicación. A esto se suma que la socialización de estos instrumentos pueda ser inadecuada o confusa, lo que genere desconocimiento y desconfianza. 

Para superar este desafío es necesario diseñar protocolos específicos para el contexto de la empresa, integrando elementos como la perspectiva de género y considerando los riesgos particulares de cada área de trabajo. 

Para su correcta difusión será necesario utilizar medios accesibles y efectivos para informar a los equipos, asegurando que todos los colaboradores comprendan su contenido.

2. Gestión ineficiente de denuncias 

Un canal de denuncias efectivo es fundamental para gestionar casos de acoso y/o violencia en el trabajo. Cuando las empresas implementan sistemas ineficaces o poco accesibles, se desalientan las denuncias y se afecta la confianza de los trabajadores. Además, si estas no se manejan con la confidencialidad o imparcialidad necesarias, podrán surgir conflictos que agraven la situación.  

Para evitarlo, es necesario adoptar herramientas tecnológicas que permitan gestionar denuncias de manera segura, confidencial y transparente, como el canal de denuncias de Portal PAR. En este canal, los equipos encargados de recibir y procesar denuncias podrán garantizar que se sigan los procedimientos adecuados.

3. Capacitación insuficiente y resistencia cultural 

Muchas empresas realizan capacitaciones o charlas esporádicas, lo que limita su impacto y la medición del aprendizaje alcanzado.  A esto se suma la posible resistencia cultural, especialmente en sectores donde las prácticas de acoso han estado históricamente normalizadas. 

Diseñar programas de formación completos y didácticos, que abordan desde conceptos básicos hasta ejemplos prácticos de prevención y acción, junto con impulsar campañas de sensibilización que involucren a todos los niveles de la organización, será fundamental para para romper barreras culturales y fomentar el cambio.

Hoy la implementación de la Ley Karin es un desafío que requiere compromiso, planificación y el uso de herramientas adecuadas. Al abordar estos tres problemas comunes con soluciones efectivas, las empresas cumplirán con la normativa y contribuirán a la creación de ambientes laborales más seguros, inclusivos y respetuosos.

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