¿Cómo la Ley Karin redefine el rol de RRHH y DO?

  • Enviado por: Cristina Soto

Con la entrada en vigencia de la Ley Karin, las gerencias de Recursos Humanos (RRHH) y Desarrollo Organizacional (DO) asumen un papel fundamental en la transformación de los ambientes de trabajo. Serán estos departamentos, en la mayoría de las organizaciones, quienes lideren la promoción de una cultura de respeto, confianza y seguridad. Pero, ¿Cómo cambia su rol?

Uno de los cambios más destacados de la Ley Karin es la obligación de desarrollar protocolos para prevenir, investigar y sancionar el acoso y la violencia en el trabajo. Antes, muchas organizaciones carecían de procedimientos claros en estos temas. Ahora, RRHH debe garantizar que estos protocolos formen parte del reglamento interno y que las personas los comprendan.

Con la Ley Karin, RRHH y DO pasan a ser guardianes del bienestar psicosocial de los equipos. Por eso será necesario realizar evaluaciones periódicas de los riesgos en el ambiente laboral. Estos departamentos deben identificar de manera proactiva estos factores permitirá tomar a tiempo medidas preventivas.

Hoy, promover una cultura de respeto y seguridad es una responsabilidad estratégica. RRHH y DO deben implementar programas de sensibilización, formación y desarrollo que refuercen estos valores. Esto implica poner en relevancia el respeto y la inclusión en todos los niveles de la organización y fomentar un ambiente donde todos los colaboradores se sientan valorados y escuchados.

Para cumplir con la Ley Karin, se requiere que RRHH implemente un monitoreo la cultura interna. Esto permite a la organización responder rápidamente y tomar medidas preventivas, asegurando que estos incidentes no se repitan. 

Finalmente, otro cambio clave es la integración de indicadores de prevención y bienestar en la estrategia organizacional. RRHH y DO deben medir aspectos como el número de reportes de acoso, el tiempo de resolución de casos y la participación en programas de formación. Estos indicadores serán una brújula que guíe las políticas de bienestar.