Las sanciones aplicadas a las personas que han sido denunciadas, particularmente en casos de acoso laboral o acoso sexual, varían dependiendo de la gravedad de los hechos y las circunstancias involucradas. Las más comunes son:
- Amonestación verbal: es una sanción leve que se aplica cuando la falta no es grave. La persona denunciada recibe una advertencia verbal sobre su comportamiento.
- Amonestación escrita: es una medida más formal, en la cual la empresa deja constancia por escrito de la falta cometida por la persona denunciada. Esta sanción tiene mayor peso que la verbal.
- Multa: aunque es una sanción que puede aplicarse, en la práctica es rara debido a los procedimientos burocráticos que conlleva su implementación.
- Despido por causa grave: en los casos más complejos, la empresa puede proceder al despido del denunciado, basándose en la gravedad del caso, la reiteración de la conducta y la relación jerárquica entre las partes involucradas.
Además de estas sanciones, las organizaciones también deben aplicar medidas correctivas para reparar el daño causado y prevenir que la conducta denunciada vuelva a ocurrir en el futuro.